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Hermanas de la Providencia

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Casa Provincial:

+ 56 2 2205 5947 comunicaciones @providenciasp.cl

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Terranova 140, Providencia, Santiago, Chile.

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Lunes a viernes de 9:00 a 13:30 hrs. y de 14:30 a 18:00 hrs.

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17 de junio, nuestro día de asueto: “Propender siempre a la paz y a la unión”

Por Hna. Gladys Flores Mardones, consejera provincial y enlace con la Oficina de la Causa de Beatificación de Madre Bernarda Morin.


Estamos prontas a cumplir 170 años de presencia en Chile como Congregación y, recorriendo nuestra historia, nos preguntamos cómo surgió la idea para que el 17 de junio de cada año sea celebrado en nuestra Congregación en Chile como el día nacional entre nosotras, Hermanas de la Providencia.

La idea nació desde todas las hermanas de la Congregación en el país, a través de una carta dirigida a madre Bernarda Morin, fechada en Santiago de Chile, el 13 de junio de 1908. Compartimos la misiva íntegra a continuación, para quienes deseen conocer más detalles:

 

SOLICITUD DE LAS HERMANAS

Piden a Ntra. Rvda. Madre se declare día de asueto el 17 de Junio

 

Muy amada Madre Nuestra:

Después de pensarlo maduramente a los pies de Nuestro Señor, hemos convenido en pedir a V. Rcia. la licencia necesaria para que el 17 de Junio de cada año, sea celebrado en nuestra amada Congregación como día NACIONAL entre nosotras. Ya que, gracias a la providencial llegada de V. Rcia. en ese día memorable del año 1853, debemos todas nuestro nacimiento a la vida religiosa y por tanto, nuestra felicidad temporal y eterna; creemos que, celebrando debidamente este día, se aumentará entre nosotras la mutua unión y nuestra gratitud para con nuestro amabilísimo esposo Jesús.

Quisiéramos, amada Madre, manifestar a V. Rcia. todos los sentimientos de nuestros corazones al aproximarse tan simpático día; pero, si lo hiciéramos, seríamos interminables, y tampoco es necesario, pues V. Rcia. ya nos conoce.

¿No es verdad, Madre Nuestra, que V. Rcia. comprende ya con lo que lleva leído de nuestra humilde solicitud, que es justa, justísima nuestra petición?

Confiando, pues, en el maternal corazón de V. Rcia., nos atrevemos a esperar el deseado visto bueno para tener el gusto de comunicarlo cuanto antes a nuestras queridas Hermanas.

De V. Rcia. sus amantes y humildes hijas.

Es gracia

Todas las Hermanas de la Congregación

Santiago, 13 de Junio de 1908

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