Por la Oficina de Comunicaciones de la Provincia Bernarda Morin.
El pasado 25 de marzo, los Asociados Providencia eligieron a su nueva directiva. Con esto, la asociada Providencia Elizabeth Farías, miembro de la anterior directiva, concluye en abril su período como coordinadora del movimiento AP de la Provincia Bernarda Morin, que reúne a comunidades de Chile y Argentina. Teniendo presente esta transición, hemos querido realizar una pequeña entrevista a Elizabeth, la que compartimos a continuación:
¿Qué mensaje te gustaría entregar a la nueva directiva?
A la nueva directiva le deseo lo mejor, que pueda cumplir fielmente la misión de los Asociados Providencia y que sigamos en conjunto como asociados trabajando por el bien y para que nunca se apague la llama de la Providencia aquí en Chile.
Tenemos como movimiento un desafío: reconquistar y conquistar personas, porque estamos envejeciendo. Necesitamos nuevas luces, nuevas personas. Por eso, a la directiva entrante le deseo lo mejor en nombre de Dios, para seguir en el servicio desde Dios hacia la comunidad.
¿Qué sientes respecto a tu tiempo como coordinadora del movimiento en la Provincia?
Me siento con el deber cumplido. Fue una entrega al servicio de Dios y de su mensaje, en mi compromiso como asociada Providencia. Fue una gran experiencia, un gran aprendizaje de cada comunidad y sus asociados. A cada uno, reciban mi eterna gratitud.
¿Cuáles crees que fueron los hitos más importantes de tu tiempo como coordinadora?
Tuvimos grandes logros. Primeros reinventarnos para seguir unidas como familia Providencia en pandemia y orar por las necesidades del momento. Gracias a Dios, la tecnología la usamos en forma positiva para mantener el contacto, comunicándonos por Zoom. Esto hizo que fuera todo más masivo, porque desde la casa podían participar muchos más asociados, lo que fue positivo. También usamos bastante el WhatsApp y los correos.
A pesar de todo lo que pasó, pudimos participar en el Congreso Internacional de Asociados Providencia que se llevó a cabo. No se hizo presencial, pero lo logramos hacer por Zoom.
Otro punto importante fue la campaña que hicimos para nuestras asociadas que estuvieron enfermas. Una buena campaña que realizamos también dentro del período de la pandemia, donde juntamos recursos monetarios.
En general, sentí mucha unión entre todas las comunidades.
¿Existe algo más que quieras resaltar?
Agradecer a madre Gloria García, por el gran apoyo que nos prestó. Ella empezó con nosotros como acompañante y aprendí mucho de su perfección, de su cariño y de su entrega al servicio.
También agradecer este tiempo compartido con madre Cristina Urbina.
Quiero dar gracias a Dios por este período en que me tocó presidir este movimiento, porque uno crece como persona y como asociada, tomando conciencia de que es un compromiso leal y de entrega a Dios en el servicio al prójimo, como lo hicieron madre Emilia, madre Bernarda y madre Joseph. Somos herederos de ese gran legado de amor, sacrificio y entrega.