26 de agosto de 2014 – Como es ya tradición, el Comité Pro-Beatificación efectuó en la Comunidad Bernarda Morín una sentida Eucaristía en memoria de nuestra querida fundadora, Madre Bernarda Morin.
La Celebración continuó con una visita al busto que se erige en su honor en la Plazoleta que lleva su nombre.
Durante la jornada nuestra Superiora Provincial, Hna. Ana Teresa Araya, destacó que se trata de un día muy significativo para la Provincia, porque se recuerda el onomástico y primera profesión religiosa de Madre Bernarda.
«Madre Bernarda dejó moldear su ser y su vida ante todo lo que Dios le presentó diariamente y por eso su existencia fue una historia de fecundidad creativa y generosidad sin límites, que redundo en vida buena para muchos y muchas que gozaron de su gran corazón. Ella misma fue rostro de la Providencia; por eso, cuando oramos para que la Sierva de Dios Bernarda Morin sea pronto venerada en los altares como santa, lo hacemos por la convicción de que ella es un testimonio vivo de seguimiento de Jesús y de transmisión de la Buena Noticia de salvación para todos, especialmente, las y los más necesitados», señaló nuestra Superiora en su mensaje.
Junto a lo anterior, afirmó que Madre Bernarda ha sido «el vivo rostro de la Providencia con sus palabras y acciones», enseñando con su vida que la «solicitud de la Divina Providencia es concreta e inmediata».
Por la tarde, el personal del Campus Providencia se reunió para un compartir sencillo y cálido, donde hubo comida, regalos y sonrisas al por mayor.
Nos unimos a todos los diversos festejos efectuados en cada una de nuestras comunidades y obras, sabiendo que hacer memoria de nuestra Madre nos anima a seguir su ejemplo de pasión por el Evangelio.
