Por Karla Meléndez, Equipo de Educación de la Provincia Bernarda Morin.
El carisma de la congregación de las Hermanas de la Providencia es la manifestación de Dios Providente y de nuestra Señora de los Dolores, en la caridad compasiva y en la solidaridad creativa y profética con los más necesitados.
Este carisma proveniente del espíritu de Dios es recibido por las hermanas y por todas las personas que trabajamos junto a ellas, quienes estamos llamados a aunar fuerzas para alcanzar las metas educativas y consolidar el Plan de Desarrollo Providencia, construyendo los centros educativos en conjunto una verdadera Red Educacional.
El trabajo en red implica que todos los actores educativos de los colegios y jardines infantiles trabajen colaborativamente y comprometidamente, viviendo a nivel institucional el ideario que expone el Proyecto Educativo Providencia. También que participen, se apoyen y, en un acto de corresponsabilidad, lleven a cabo un proceso de fortalecimiento que permita alcanzar un óptimo bienestar y una mejoría de las necesidades detectadas, para alcanzar los objetivos propuestos; poniendo a la persona en el centro, favoreciendo la creatividad y formación de personas disponibles, para ponerse al servicio de la comunidad.
A través de su mensaje para el lanzamiento del Pacto Educativo, del 12 de septiembre de 2019, el Santo Padre propone comprometernos en un pacto, en una alianza educativa, como él precisa. Invita a buscar compañeros de viaje en el camino de la educación, estableciendo una alianza entre todos que dé valor a la unicidad de cada uno a través de un compromiso continuo de formación, respetando la diversidad y la indispensabilidad de cada contribución. La Red Educacional Providencia trabaja diaria y arduamente por lograr lo propuesto por el Papa, especialmente a través del sello transversal de «formación ambiental», presente en todos los centros educativos.
La Red se sustenta en la consolidación de equipos que sean a su vez comunidades de aprendizaje, donde se aprenda y se aporte, con cultura participativa, flexible, promoviendo altas expectativas de logros de los estudiantes en lo académico y formativo, favoreciendo en ellos una creciente autonomía, innovación y fortalecimiento de la identidad católica.
Se espera que mediante el trabajo en conjunto y colaborativo se logre:
- Crear comunidades de desarrollo profesional que se cuestionan, reflexionan y generan propuestas frente a los diversos desafíos.
- Definir criterios comunes para abordar el quehacer educativo de manera de facilitar y regular la labor formativa y aumentar la efectividad.
- Generar un ambiente facilitador del aprendizaje de los estudiantes
- Favorecer una relación colaborativa familia-escuela en función del aprendizaje
- Mejorar el clima laboral de las organizaciones.
- Comprender a la comunidad como la clave para que el cristiano viva los valores evangélicos, pues allí se conocen y se encarnan.
La fuerza formativa de la Red Educacional Providencia ofrece a cada uno de los centros educativos el distintivo que la hace trascender a una estructura organizacional sólida. Además, la identidad en el Carisma Providencia le ofrece la certeza de que existe una iniciativa divina que busca hacerse presente a través de ella y procura conducir a un determinado grupo de personas por caminos de bien y santidad, con la promesa de que «Cuando hay dos o más reunidos en mi nombre, yo estaré ahí en medio de ellos» (Mt. 18,20).
Imagen con íconos de personas en círculos interconectados, diseñada utilizando recursos gratuitos de Flaticon.com.