Desde fines de abril, el Comedor Emilia Gamelin extendió sus días de servicio en la entrega de almuerzo a personas necesitadas, considerando especialmente a hermanos que viven en situación de calle. Ahora, tal como en años pasados, esta obra atenderá de lunes a viernes, gracias a la colaboración de nuevos voluntarios y a la labor de Macarena Arévalo, cocinera recientemente incorporada por la Provincia, quien de lunes a jueves formará parte permanente del personal del Comedor.
Durante los martes, la ayuda en la cocina, limpieza y atención a los hermanos será realizada por voluntarios del colegio Santa Rosa. La Pastoral de la institución, coordinada por Pamela Santander, invitó a distintos miembros de la comunidad educativa a cooperar, quienes irán rotando durante todo el año. También se espera invitar a las estudiantes en el futuro. De esta manera, el martes 20 de abril estuvieron colaborando en el Comedor algunos apoderados del colegio.
January Díaz, apoderado del Cuarto Básico B del colegio Santa Rosa, comentó en dicha oportunidad que junto a su esposa, Cynthia Yáñez, quisieron participar como voluntarios porque les gusta cocinar y consideraron que podían ser de utilidad. “Desde que me transformé en profe y desde que tuve una hija”, señala, “me nació más el lado de ser más empático con la gente, ver las realidades distintas, ver en qué puedo ayudar con mis capacidades. Y si tengo tiempo disponible, en vez de estar viendo series o estar leyendo, prefiero utilizarlo en algo productivo”.
Adicionalmente, el Comedor recibirá además los jueves la colaboración de voluntarios del Colegio de la Providencia Carmela Larraín de Infante de Maipú, quienes también fueron invitados por la Pastoral de la institución e igualmente irán rotando. Así, el jueves 2 de mayo llegaron hasta la obra varios profesores y asistentes de la educación, entre ellos Rosita Meléndez, inspectora del Colegio, quien indica que también entre los planes se encuentra el invitar a los estudiantes. “Queremos traer a los terceros y cuartos medios por grupos”, puntualiza, “para que se impregnen un poco de esta realidad que probablemente no conocen”.
La inspectora además hace un llamado para colaborar en la obra: “Felicito a este comedor, que lleva ya muchos años, pero siempre se necesita ayuda. Espero que a la gente se le ablande el corazón y puedan haber más voluntarios y más ayuda […]. Que puedan sensibilizarse con esta obra que es tan linda y que ojalá nunca se acabe, porque hay quienes sufren mucho”.
Desde la Provincia se agradece el interés de los colegios Santa Rosa y Carmela Larraín de infante por colaborar activamente con la Misión de la Congregación, ayudando a proclamar el misterio de la Providencia y el de Nuestra Señora de los Dolores a la sociedad de nuestro tiempo, “mediante la caridad compasiva y la solidaridad creativa y profética con los pobres”[1].
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[1] Constituciones y Reglas de las Hermanas de la Providencia. Misión de la comunidad de las Hermanas de la Providencia. Capítulo general 1978. Página XXII.
¿Deseas colaborar con el Comedor Emilia Gamelin? Si es así, te invitamos a visitar la siguiente página para obtener más información: Ayúdanos a dar alimentos a personas que lo necesitan
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