Los Asociados y Asociadas Providencia de la comunidad de Ovalle celebraron una Mesa del Rey Navideña para más de 60 personas en situación de calle el pasado 21 de diciembre. En la actividad colaboraron profesores y asistentes de la educación del Colegio la Providencia de Ovalle, además de Hermanas de la Providencia, ex alumnas y familiares.
“Queremos dar amor, respeto, dedicación y alegría a los más marginados de nuestra sociedad”, cuenta Cecilia Martínez, AP y coordinadora de Pastoral. “Los alimentos son secundarios, en cambio, ellos mismos indican que la conversación, el ser escuchados con respeto y cariño, cantar, bailar, recibir un abrazo y un beso de saludo, eso es lo más importante. Se lo llevan en el corazón”, añade.
Además, durante la Mesa del Rey los AP realizaron un bazar de ropa y calzado gratuito. Todos los participantes se organizaron en equipos de cocina, ornamentación, atención del bazar, liturgia Navideña y servicio, entre otros.
Es conocido que la Mesa del Rey es una antigua práctica de los AP en el mundo, heredada de Madre Emilia Gamelin. En Ovalle, es una tradición que ayudó a hacer crecer el movimiento en la ciudad y que ya ha sido imitada por varias organizaciones. Esta actividad es parte fundamental del plan anual de trabajo de esta comunidad AP, siendo la Mesa del Rey de Navidad y la de Fiestas Patrias las más especiales.
Entrega de ayuda a personas mayores
Otra de las iniciativas que la comunidad AP de Ovalle llevó adelante esta Navidad fue la entrega de “cajas de amor” a personas mayores vulnerables, a quienes se visitó en sus casas el 23 de diciembre. Apoyados por el personal del colegio, amigos y amigas, los AP donaron estas cajas con variados alimentos. Parte de lo recolectado, además de vestuario, fue donado también a la Capilla Santa Teresa de los Andes, de la Población Ariztía Oriente; que las entregó en una convivencia para un grupo de 27 abuelitos y abuelitas.
Amigas, Asociadas, Asociados y Hna. Ema Maureira apoyaron la celebración del Mes de María Misionero, la Novena de Niño Dios y la liturgia de Navidad en la capilla. Como cierre de la Novena, la comunidad de Santa Teresa, con ayuda de la Parroquia El Divino Salvador, Grupo de Oración Maranatá y el grupo de catequesis de primer año, prepararon la convivencia para las personas mayores, donde los AP aportaron con sus “cajas de amor”, apoyo económico y ropa recibida desde Santiago.
En todas estas actividades “la tarea animadora de Madre Ema Maureira y Madre Gladys Núñez representaron fielmente el Carisma de las Hermanas de la Providencia”, indicaron desde la comunidad AP.